martes, 31 de marzo de 2009

Contate otro

En un pueblo remoto vivía una joven muchacha, que no exactamente agraciada mas sí la más graciosa que se recordara en la región. Cada mañana, ella se subía a un pequeño estrado de la plaza del pueblo y exclamaba a los cuatro vientos algún disparate. "Don Tacaño me acaba de jurar que hoy regala todas sus papas", anunció solemnemente una vez. Todos los pueblerinos reían sonoramente a los pocos instantes, porque sabían que el mencionado feriante vendía sus productos más caros que sus colegas y jamás daba yapa.

"¡Un hombre que está aquí con nosotros quiere ir a la luna!", dijo la moza otra mañana ante las risas de la multitud. Un fornido brazo que se alzó enseguida generó aún más carcajadas, incluso de la propia muchacha. "A partir de mañana, el sol saldrá por el noroeste y caerá por ese mismo lado", "el chico lustrabotas quedó embarazado", "el gobernador prohibió pintar las paredes de las casas de color blanco"... Cada mañana, todo el pueblo festejaba las ocurrencias de la joven.

Rara vez se ausentaba de su tierra natal. Las contadas ocasiones eran aprovechadas para la humorada siguiente. Una vez que volvía de la ciudad grande, dio una inusual noticia: "Acabo de enterarme que se ha demostrado que la tierra no es plana, ¡sino redonda como una pelota!" Enseguida, el gallego de la taberna retrucó en medio de las sonrisas: "¿Vieron que tenía razón? Y para algún lado seguro que se mueve..."

La moza sabía que, cuando sus bromas faltaban a la cita, la gente se sentía desganada y desdichada. Por eso, además de disfrutar de su trabajo -ella se ganaba el pan de cada día de esa manera-, se sentía responsable de la felicidad del pueblo.

- o -

Una noche en que la joven visitaba la ciudad grande, escuchó desde su habitación en la posada la apresurada llegada de un mensajero a la casa del gobernador. Sin dar tiempo a que las escasas personas en vela culminaran de sorprenderse por el inusualmente agitado aspecto del mensajero, el gobernador salió y bramó en plena oscuridad: "¡Se viene la guerra! ¡Todos los hombres presentarse en las puertas con sus armas! !Mujeres, ancianos y niños, escóndanse en los subsuelos secretos!" Los rumores crecieron rápidamente: "Me dijeron que hay veneno cayendo del cielo. ¡Que lo tira el propio enemigo!" "Tienen carros metálicos que se mueven solos y tiran cañonazos increíblemente destructivos, o así me dijo la cuñada del herrero."

La muchacha, en camisón y casi en pánico, tomó uno de los tantos caballos sueltos que se abrían paso entre la enloquecida muchedumbre, y cruzó las puertas al galope rumbo a su pueblo a advertir de la emergencia. Sin que el sol terminara de despuntar, la joven cruzó el puente de su pueblo, detuvo la marcha en la plaza, juntó todas sus fuerzas y finalmente gritó: "¡La ciudad grande está por ser atacada! ¡Se nos acerca el enemigo en son de guerra!" Acercándose a la casa del gobernador, que quedaba sobre la plaza, continuó: "¡Señor, por favor, ordene que el resto se prepare y se junte aquí para luchar!"

Algún apagado aplauso hizo eco en la estrecha plaza. Pero la mayoría de la gente apenas había despegado los ojos, y no comprendía la actitud de la muchacha. Algunos protestaron irritadamente: "¡Pero mirá la hora que es!" "¿Podés hacernos el favor de contarte otro chiste más ameno a las nueve campanadas, como de costumbre?" "¡Por una vez callate y dejá de embromar, mocosa!" Quienes apenas podían desperezarse soltaban quejidos inentendibles.

Pero antes de que la muchacha se atreviera a responderles, todos los pueblerinos sintieron un temblor grave que sacudió las casas y los árboles. "¡Al este, miren al este!", vociferó el guardia de la torre del campanario, señalando unas manchas grises que se acercaban vertiginosamente en el pálido cielo.

La joven apenas tuvo tiempo de maldecir el instante en que decidió bromear cada mañana. Y no dijo nada más, porque una enorme ave plateada cruzó el firmamento con decisión y arrojó la desgracia al inocente pueblo.

Moraleja: si nunca demostrás saber hacer algo, nadie creerá que sabés hacerlo.

viernes, 27 de marzo de 2009

El último apretón de tuerca: F1 2009

El Campeonato Mundial de Fórmula 1 arranca este fin de semana en tierras australes. Con el cambio del reglamento técnico, las cartas quedaron bien barajadas. Según surge de los ensayos de pretemporada, Ferrari podría tener problemas de fiabilidad; McLaren, Renault y BMW andarían más lentos que el año pasado; Brawn (ex Honda) podría dar la sorpresa; y Force India y Toro Rosso seguirán en el fondo. A los tres equipos restantes (Red Bull, Toro Rosso y Williams) los veo difusos en mi bola de cristal líquido.

El alerón delantero ahora tiene más envergadura que las ruedas, lo que es sinónimo de miedo a perderlo en una lucha con otro piloto. A cambio de un alerón trasero más angosto, alto y deforme, volvieron los neumáticos completamente lisos. Varios pilotos dirán que son más divertidos de manejar, pero los Fórmula 1 nuevos se ven realmente espantosos.

Las numerosas medidas para bajar costos son compensados por la idiotez de permitir frenos regenerativos. Los equipos vienen patinando millones en desarrollar sistemas que permitirán activar un boost durante unos pocos segundos por vuelta. Medidas esenciales como prohibir los frenos de carbono, achicar los tanques de combustible, limitar la cantidad de reabastecimientos por carrera y reducir la cantidad de marchas a cinco siguen olvidadas en el DOPI (*1) de la FIA.

Quedó confirmado que el sistema de puntuación será el mismo del año pasado: 10-8-6-5-4-3-2-1. Menos mal. Espero que para el año que viene le den más puntos a quienes llegan al podio. Me atrae la propuesta de la asociación de equipos de otorgar 12-9-7... puntos, aunque el ganador bien podría llevarse un puntito más. Si la cantidad de pilotos puntuadores baja, ni preciso matarlos; los equipos chicos se esfumarán.

Como para no romper la tradición, se estrena un nuevo gran premio en un "país emergente". El certamen cerrará con el Gran Premio de Abu Dhabi, que se correrá en un circuito obviamente diseñado por Hermann Tilke e insertado en un exhuberante parque temático. Este año le toca a Suzuka celebrar el Gran Premio de Japón.

Pero lo más importante es la pérdida de Montreal y Magny-Cours. Es la primera temporada de la máxima sin fecha en Francia desde 1955, y la primera que no toca América del Norte desde 1958. Se habla de que el año que viene podría desaparecer la fecha germana, lo que jamás ocurrió hasta ahora. Esta década ya nos despedimos de tres pistas legendarias (Zeltweg, Imola e Indianápolis), y no soportaría que Hockenheim y Nürburgring se dejaran de usar tras haber sido recortadas a lo bruto.

¿Será esta época de crisis también de resurrección? En pocas horas nos enteraremos.

(*1: Departamento de Objetos Perdidos Intencionalmente)

jueves, 26 de marzo de 2009

El último apretón de tuerca: AUVo 2009

Este fin de semana se disputará la primera fecha de los Campeonatos Nacionales de Automovilismo en Pista de la Asociación Uruguaya de Volantes (*1). Tras varios años de emisión por televisión abierta, a partir de esta temporada se transmitirá por VTV. Sabiendo que el fútbol tiene más prioridad que cualquier otra cosa, no deberíamos sorprendernos si las carreras comienzan a transmitirse en diferido en horarios aleatorios o incluso resumidas.

Con respecto al parque automotor, la gran novedad es la aparición de una monomarca Ford Focus a partir de abril o mayo. Al igual que el Fiesta, el sustituto del Escort es muy común en el automovilismo argentino y brasilero, pero jamás había pisado El Pinar. Para finales de temporada, podría aparecer un Volkswagen Gol NF oficial en la categoría Superturismo. Tampoco debemos olvidar que la Fórmula 3 Sudamericana quiere visitar El Pinar y Piriápolis de la mano de la AUVo.

Con la promesa de correr por fin en Punta del Este, de estrenar el autódromo de Mercedes y de mantener Piriápolis en el calendario, el campeonato podría lograr algo magnífico: bajar la proporción de carreras en El Pinar a un mísero... 60%. Mejor que 100%, seguro.

Chau resistencia, chau cambio de pilotos, chau recarga de combustible. El próximo domingo, el Superturismo probará un nuevo formato de carrera inaugural: 100 km sin pausa y con un único piloto y juego de neumático por máquina. Ya que podremos disfrutar de tanta variedad de escenarios, podríamos alternar formatos de carrera.

Por ejemplo, El Pinar número 4 ("el Potrero") y Piriápolis podrían correrse con tres series de 10 autos y 10 minutos, y una final a 20 autos y 20 minutos. Las carreras de Mercedes y el número 3 de El Pinar podrían hacerse a dos mangas de 30 minutos con puntaje reducido, y suma de tiempos para el puntaje completo y la foto del podio (*2). Los circuitos 6 y 7 no me gustan porque son incorrectamente trabados. Y como el público se merece que los bólidos doblen la Veloz habiendo acelerado desde el Parador, vendría bien experimentar el circuito perimetral de El Pinar (¿número 1?). Al ser tan corto con apenas dos horquillas y un curvón, el espectáculo sería sin dudas inusual y atractivo.

A rezar a San Gonchi, entonces, que este año se cumple una década de su revuelco en el sacacorchos californiano.

(*1: Está largo el nombre, ¿no?)
(*2: Ese mismo formato se podría usar para las 2 Horas de El Pinar.)

viernes, 20 de marzo de 2009

Muerte a la obligación de vivir

"La mayoría de las religiones condenan el suicidio, pero las leyes no pueden hacerlo, ya que el cuerpo del delito y el del delincuente en este caso son la misma cosa. Sin embargo, las legislaciones anglosajonas consideran delito a la tentativa de suicidio, cuando el suicida ha fracasado; en algunos casos, incluso, han llegado a condenarlo a muerte." Les Luthiers, La vida es hermosa (disuacidio)

Supongamos que alguien quiere jugar a la ruleta rusa, disputar carreras motorizadas legales, darle la espalda a un toro bravo, practicar boxeo profesional, embarcarse en un chinchorro a la Antártida, tirarse de un avión sin paracaídas, o prepotear a un delincuente en un barrio pobre. ¿Quién tiene derecho a prohibirle a esa persona enfrentarse a la muerte? Será temeraria, inconsciente, irracional y/o simplemente idiota... ¿y qué?

Imaginemos una persona que sufre una angustia insoportable porque padece una enfermedad terminal, totalmente intratable, irreversible e incurable. ¿Quién puede obligar a esa persona a seguir recibiendo un tratamiento que sólo le causa más daño? Si esa persona tiene esperanzas de superar el padecimiento, nadie debería obligarle a morir. Pero también está mal que alguien le imponga una extra vida contra su voluntad.

Yo creo que vivir es un derecho, no una obligación. Creo que es una elección personal, no una imposición ajena. Cada persona tiene la libertad de decidir cómo morir y cuándo. De la misma manera que estoy dispuesto a que un comunista o un conservador intentasen convencerme de sus ideologías, estoy a favor que la gente que desea morir sea asesorada. Pero estoy en contra de que la gente sea forzada.

La única restricción insalvable al deseo de vivir es obviamente una enfermedad. Si alguien tiene pronóstico para morir en un mes debido a una enfermedad, es imposible que esa persona viva más tiempo sólo porque lo desea (*1). Pero eso ocurrirá porque la naturaleza así lo dispone. Pero nadie debería quitarle a otra persona ese derecho.

(*1: Obviamente, el pronóstico puede sido incorrecto y la persona puede curarse.)

jueves, 12 de marzo de 2009

¡Quién lo diría!: re(as)tórica

Una vez que estudiábamos oratoria en el liceo, la profesora nos hizo escuchar un audio de un discurso político completamente hueco. Las frases eran más o menos así: "Debo dejar tres cosas en claro. Primero que nada, y esto debe interpretarse sin tergiversaciones de nuestros rivales... Y segundo, esto no debemos olvidarlo jamás como nación..." Era un discurso ficticio, que caricaturizaba lo que solemos escuchar y leer día a día. Pero la realidad supera a la ficción.

Como el semanario Búsqueda no publica sus artículos en internet de manera gratuita, esta vez no hay adivinanza. Mi frase de la semana del 5 al 11 de marzo de 2009 es ésta: "Uruguay ha establecido una serie de factores que conforman un sistema que hay que considerar en su conjunto". ¡Quién diría que semejante afirmación no se publicó en la sección de humor! Salió escrita en boca de Danilo Astori en la página 3 de la sección política.

Bah, hice un poquito de trampa. Astori continúa el enunciado para defender el secreto bancario. Sin embargo, un profesor de Filosofía, Literatura o Lógica podría opinar que Astori confundió y/u omitió conceptos. Podría haber dicho "[...] ha establecido en el sistema bancario una serie de políticas [...]", o aún mejor, "la serie de políticas establecidas en el sistema bancario uruguayo deben considerarse en su conjunto".

Pero hablar en vivo tiene esos problemitas. Por eso escribo una bitácora en vez de grabar mi voz.

sábado, 7 de marzo de 2009

El verde y ondulado desierto

Cada año, demasiados alumnos entran a la Universidad de la República Oriental del Uruguay para intentar empezar una carrera profesional y académica. La inmensa mayoría de los estudiantes tiene malos resultados curriculares; recursa los cursos una y otra vez, retara las tareas y una otra vez, reexamina los exámenes una y otra vez, y gran parte de ellos termina desertando de la UdelaRodelU.

Para nadie es sorpresa. Los salones rebozan de gente, olor a pata y aburrimiento. Los estudiandos llegan mal formados del liceo, en particular de los públicos, y a menudo eligen la carrera por descarte. Los profesores son pocos para tantos aprendices, y están mal pagos, poco motivados y peor formados pedagógicamente. Apenas hay rubros para papel, tinta, vidrios y sillas rígidas (y ninguno para sillas ergonómicas).

Al poner pruebas guillotinescas, los educadores no logran sacarse de encima a los educandos. Muchísimos se rinden y abandonan la UdelaRodelU. Los más tercos dan las malditas materias una infinidad de veces, pese a que gastan eternas horas estudiando. Sería más fácil si los enseñadores hicieran aprobar a los estudiandos con pruebas chotas, pero esta teoría es meramente especulativa. Y olvídense del significado de su profesión.

A algún revolucionario se le ocurrió cobrarle la educación al estudiantado rico, y con esa plata incentivar al enseñantado pobre a cursar la UdelaRodelU, conseguir el preciado papelito y desarrollar la menos preciada mas invaluable materia gris. Otros radicales propusieron exigir a los aspirantes superar una simple prueba de conocimiento.

Pero a casi todos los involucrados, esas medidas les suena a herejía, porque menos gente tendría acceso a la UdelaRodelU. Se les chispotea que una universidad debe lograr la mejor formación posible de la mayor cantidad de egresados, no lograr la mayor cantidad de ingresados. Es que entrar a conocer parece importar menos que querer salir conociendo. Y eso que exportamos jóvenes como pocos países.